Fisiología: La salida | |
Desde el propio
comienzo de la práctica deportiva, se han estudiado los cambios
biológicos de los atletas que se preparan durante períodos
largos en busca de elevar su capacidad física para poder llegar
en forma óptima a la competencia. Además se han ido realizando
las investigaciones para conocer a ciencia cierta el funcionamiento del
cuerpo humano y en especial su metabolismo, que han aportado y continúan
aportando nuevas teorías y formas de entrenamiento, con un objetivo
único, economizar y optimizar el proceso del entrenamiento deportivo. Estos estudios a los
que nos referimos y en especial el caso que nos ocupa, la rama de la Bioquímica
Deportiva, se realizan para poder determinar, en primer lugar, el
estado actual de los atletas, así como también los niveles
que estos van alcanzando, según la alimentación que requieren,
el tiempo de recuperación, el tipo de entrenamiento que se utiliza
y algo muy fundamental que nos han aportado estas investigaciones es conocer
también las diferencias existentes entre sujetos entrenados y no
entrenados o el trabajo con diferentes edades que es de vital importancia. Remo,
actividad aeróbica por excelencia, aunque durante su competición,
la regata, se realiza bajo condiciones aeróbicas- anaeróbicas,
y es un deporte que ha suscitado gran interés a muchos investigadores
del mundo entero. Las regatas de Remo,
se realizan a partir de la distancia de 2000 metros, y se dividen desde
el punto de vista analítico en tres partes: - Arrancada. - Estabilización. - Final. En este apartado abarcaremos los cambios bioquímicos que se provocan durante la arrancada, la cual tiene una duración aproximada de 50 seg. - 1.25 min., ubicándose de esta forma en la zona anaeróbica láctacida. Vías Metabólicas durante la arrancada. La fuente energética inmediata para el desenvolvimiento de la actividad muscular es provocado por la desintegración del ATP, durante la hidrólisis enzimática del propio compuesto ATP. En condiciones normales, la resíntesis de ATP se efectúa por medio de las transformaciones aeróbicas, pero en caso de una actividad muscular intensa (como lo es la arrancada), cuando el arribo de oxígeno a los músculos se dificulta, en los tejidos se intensifican simultáneamente los procesos de resíntesis de ATP, aquí es donde se le da paso a los tres tipos de procesos anaeróbicos en los cuales es posible la resíntesis del ATP. Estos son los procesos de: -Reacción de creatinfosfoquinasa (CPQ). -Reacción de mioquinasa. -Glicólisis
Anaeróbica.
En el músculo las reservas de ATP suelen bastar para 3 ó 4 contracciones aisladas de fuerza máxima, al mismo tiempo investigaciones que se han realizado al respecto han aportado que en el proceso de trabajo muscular no se observa una disminución significante de la concentración de ATP, esto es explicado con el hecho de que en el transcurso de la actividad muscular, el ATP se recupera a partir de los productos de descomposición con una velocidad igual a la de su desintegración en el proceso de contracciones musculares. Con la actividad muscular, la resíntesis de ATP puede realizarse tanto en le curso de las reacciones que se desarrollan sin oxígeno, como a expensas de las transformaciones oxidativas en las células relacionadas con el consumo de oxígeno. Pasemos pues a un breve análisis de estas reacciones:
(Cuadro
1). El contenido de CrP en los músculos supera 3 veces, aproximadamente el de ATP. Las reservas de fosfágenos aseguran la producción de energía en el tejido muscular, lo que provoca mantener los esfuerzos de potencia máxima durante 10 ó 15 seg. En un músculo que trabaja, la velocidad de desintegración de CrP depende directamente de la intensidad del ejercicio o de la magnitud de la tensión muscular. En los primeros segundos después de iniciar el trabajo, cuando la concentración de CrP en los músculos es alta y la actividad de CPQ se mantiene a un alto nivel. Únicamente después de tener agotadas las reservas de CrP en los músculos en una tercera parte aproximadamente, la velocidad de la reacción de CPQ comienzan a disminuir y en el proceso de resíntesis de ATP intervienen cada vez más la glicólisis y la respiración, cuyos sistemas enzimáticos se localizan en el sarcoplasma y las mitocondrias de los músculos esqueléticos. Esto sucede con el aumento de la duración del trabajo; pasados 29 seg, la velocidad de la reacción disminuye 2 veces. La reacción de la CPQ constituye la base bioquímica de la resistencia muscular local. Esta reacción da la posibilidad de pasar rápidamente del reposo al trabajo, cambiar súbitamente el ritmo en el transcurso de su ejecución, así como acelerar para llegar a la meta. Reacción
de la mioquinasa. Glicólisis. En el momento del proceso de trabajo muscular donde la reacción de la CPQ deje de asegurar la velocidad necesaria de recuperación de ATP desintegrado en las miofibrillas durante la actividad contráctil , y en el sarcoplasma aumente la concentración de las moléculas libres de ADP, la glicólisis anaeróbica comenzará a desempeñar el papel principal en la resíntesis de ATP. En el proceso de glicólisis las reservas intramusculares de glucógeno y la glucosa, suministradas a las células de la sangre, se desintegran por vía enzimática hasta que se forme el ácido láctico. Las enzimas fosforilasa
y hexoquinasa que participan en las reacciones iniciales de la glicólisis,
se activan fácilmente al aumentar las concentraciones de ADP y
de fosfato inorgánico en el sarcoplasma. Además, la producción
de la forma activa de la fosforilasa se estimula con el desprendimiento
de las catecolaminas e iones Ca++ en el proceso de activación
de la contracción muscular. Todo esto contribuye a que la glicólisis
comience a incorporarse rápidamente al proceso de resíntesis
de ATP con el inicio del trabajo muscular. En la etapa inicial
de la glicólisis la molécula de glúcido se activa
debido a la asociación del grupo fosfático procedente del
ATP, la que , sometida a varias reacciones sucesivas, se transforma en
aldehído fosfoglicerido que sirve de sustrato para la oxidación
anaeróbica en una de las reacciones centrales de este proceso enzimático.
Como resultado de la oxidación, el aldehído se convierte
en ácido y la energía liberada se utiliza para formar los
enlaces fosfáticos macroérgicos. En la etapa final de la
glicólisis los compuestos macroérgicos intermedios - ácidos
difosfoglicerido y fosfopirúvico- ceden el grupo fosfático
rico en energía al ADP y provocan así la resíntesis
de ATP. La potencia máxima
de la glicólisis es un poco menor que la potencia de la reacción
de la CPQ pero 2 ó 3 veces mayor que la del proceso aeróbico.
Este proceso de la glicólisis alcanza la velocidad máxima
al comienzo, 20 ó 30 seg después del inicio del trabajo
y al fin del primer minuto de trabajo llega a ser la fuente principal
del ATP en resíntesis. Sin embargo, con el aumento de la duración
del ejercicio, el agotamiento rápido de las reservas de glucógeno
relativamente pequeña en los músculos y la disminución
de la actividad de las enzimas claves de la cadena glicolítica,
bajo la influencia del ácido láctico formado y la reducción
del pH intracelular, provocan la caída de la velocidad de la glicólisis
15 min después del inicio del trabajo, la velocidad del proceso
glicolítico constituye solo la mitad del valor inicial. La capacidad metabólica
de la glicólisis, determinada por las reservas intramusculares
de glúcidos y por las dimensiones de los sistemas tampón
que estabilizan el valor del pH intracelular, permite mantener la potencia
asignada del ejercicio en el intervalo de 30 seg a 2.5 min. Por tanto,
la capacidad de este proceso es un orden mayor (más de 10 veces)
que la de la reacción de CPQ. El ácido láctico,
producto final de la glicólisis, se forma exclusivamente en condiciones
anaeróbicas, aunque la glicólisis puede efectuarse también
en presencia de oxígeno. Sin embargo, en nuestro caso la glicólisis
termina en la etapa de formación del ácido pirúvico,
el que posteriormente puede ser sometido a las transformaciones oxidativas
en las mitocondrias musculares. Debido a la alta concentración
de ácido pirúvico, una parte de éste puede convertirse
en alanina y , al verterse de los músculos a la sangre se incorpora
al ciclo de glucosa- alanina que junta las transformaciones de
glúcidos en el hígado y en los músculos. En condiciones
de una actividad muscular intensa, este ciclo tiene una importancia auxiliar;
la cantidad fundamental de glúcidos que se desintegran siguiendo
la vía metabólica, se transforma en ácido láctico.
La formación de cada molécula de ácido láctico
equivale a la resíntesis de 1.0 a 1.5 moles de ATP. La acumulación
del ácido láctico con el trabajo anaeróbico se halla
en dependencia directa de la potencia y la duración general del
ejercicio (Gráfica 1). El ácido láctico
se difunde fácilmente a través de las membranas celulares,
según el gradiente de concentración. Llegando de los músculos,
trabajando a la sangre, se pone en interacción con el sistema tampón
de bicarbonato, lo que provoca el desprendimiento del exceso "no metabólico"
de CO2, puesto que el aumento en las concentraciones de los
iones hidrógeno y la elevación de la tensión de CO2
sirven de señales metabólicas principales para el centro
respiratorio, al salir el ácido láctico a la sangre, se
intensifican bruscamente la ventilación pulmonar y el suministro
de oxígeno a los músculos que trabajan. La acumulación
del ácido láctico, la aparición del CO2
excesivo, la variación del pH y la hiperventilación pulmonar
que reflejan la intensificación de la glicólisis en los
músculos, suelen revelarse cuando la intensidad del ejercicio constituye
un 50% de la potencia aeróbica máxima. Este nivel de intensidad
se designa como "umbral del metabolismo anaeróbico". Cuando más
temprano este se alcance, tanto más rápido se pondrá
en acción la glicólisis, acompañada de la acumulación
del ácido láctico y del desarrollo de la fatiga en los músculos
en actividad. Al mismo tiempo, hay
que destacar que la glicólisis desempeña un rol importante
durante la actividad muscular intensa en condiciones de un abastecimiento
no adecuado de oxígeno a los tejidos: sirve para la así
llamada resistencia a la velocidad, en un fuerte predominio de energía
en los ejercicios cuya duración máxima oscila entre 30 seg
y 2.5 min, ya que a expensa de la glicólisis se realizan las aceleraciones
duraderas haciendo el ejercicio y al acercarse a la meta. Recuperación.
Proceso altamente beneficioso. En la actividad deportiva
se manifiestan muchos cambios como ya hemos visto, pero la labor no es
solo dar y exigirle cargas al organismo, sino dar un periodo donde el
pueda recuperarse y comenzar de nuevo la actividad con mejor adaptación
y mayor calidad, este proceso mediante el cual el organismo vuelve a la
normalidad después de una carga física se conoce como, recuperación. En el período
de descanso después del trabajo, las alteraciones bioquímicas
efectuadas en los músculos y órganos durante la ejecución
de la actividad física, se eliminan poco a poco. Estas alteraciones
consisten en la reducción del contenido de sustratos de transformaciones
energéticas en los músculos, en el proceso de trabajo (CrP,
glicógeno) y el aumento del contenido de productos del metabolismo
intracelular (ADP, AMP, H3PO4, ácido láctico,
etc.). la acumulación de los productos del metabolismo "de trabajo"
y la intensificación de la actividad hormonal, estimulan los procesos
de oxidación en los tejidos en el período de descanso después
del trabajo, lo que ayuda a recuperar las reservas intramusculares de
sustancias energéticas, normaliza el balance acuoso-electrolítico
del organismo y facilita de esa forma la síntesis inductiva de
proteínas en los diferentes órganos sometidos a la carga
física. Según la tendencia
general de los cambios bioquímicos que ocurren en el organismo
y el tiempo necesario para su retorno al normalidad, se destacan dos tipos
de procesos recuperadores: Recuperación Urgente: Se extiende a las primeras 0.5- 1.5 horas de descanso después del trabajo, en este período se van a eliminar los productos de la descomposición anaeróbica acumulados durante el ejercicio y a pagar el débito de oxígeno. Recuperación
Aplazada: Se extiende a muchas horas después
del trabajo y consiste en los procesos intensificados del metabolismo
plástico y la restauración del equilibrio iónico
y endocrino alterado en el organismo durante el ejercicio. En este período
se restablecen por completo las reservas energéticas del organismo,
y se intensifica la síntesis de las proteínas estructurales
y enzímicas destruidas durante el trabajo. Estos procesos de recuperación después del trabajo ocurren a diferentes velocidades y finalizan a distinto tiempo, fenómeno de heterocronismo. Por su orden podemos ver que las más rápidas en recuperarse son las reservas de oxígeno y CrP en los músculos que trabajaron, luego las reservas intramusculares de glucógeno y las de glucógeno hepático y por último, las grasas y estructuras proteicas destruidas y dañadas durante el trabajo. Por supuesto, la intensidad del desarrollo de los procesos de recuperación y los plazos de recompensación de las reservas energéticas tienen una dependencia directa con la intensidad de su consumo durante la ejecución del trabajo. Además la intensificación de los procesos de recuperación da lugar a que en un instante determinado de descanso después del trabajo, las reservas de sustancias energéticas superen su nivel de antes del trabajo. Este fenómeno recibe el nombre de supercompensación (Gráfica 2.). Ej. Supercompensación del Glucógeno. Gráfica 2.Fenómeno de Supercompensación. 1. Fase de agotamiento. 2. Fase de recuperación 3. Fase de superrecuperación. 4. Fase de estado consolidado. Adaptación
y efecto de entrenamiento. Si analizamos el entrenamiento deportivo podemos ver que es desde el punto de vista biológico es un proceso de adaptación dirigida del organismo a la influencia de esfuerzos físicos. Los esfuerzos físicos
aplicados a diario durante el proceso de entrenamiento, desempeña
el papel de estimulo que excita los cambios adaptativos en el organismo.
La tendencia y la magnitud de los cambios bioquímicos que tienen
lugar como respuesta a los esfuerzos físicos, determinan el "efecto
de entrenamiento". El grado de influencia que el esfuerzo físico
ejerce en el organismo, depende de la dosificación elegida de sus
características fundamentales: la intensidad del ejercicio a ejecutar
y su duración, el número de repeticiones de los ejercicios,
la magnitud de las pausas de descanso entre ellos, el carácter
del descanso y los tipos de ejercicios. La modificación de cada
una de las características mencionadas del esfuerzo físico,
provocan cambios bioquímicos determinados en el organismo, y su
acción conjunta, originan considerables reestructuraciones del
metabolismo, lo que se expresa en el cambio de los así llamados
estados metabólicos del organismo. Según el carácter
y el tiempo de realización de las modificaciones adaptativas, en
el organismo y el metabolismo, se destacan dos etapas de adaptación: -Etapa de adaptación urgente. -Etapa de adaptación de larga duración.
La etapa de adaptación urgente es la respuesta inmediata del organismo a la acción única del esfuerzo físico. Esta se realiza sobre la base de los mecanismos bioquímicos anteriormente formados y se reduce, en lo fundamental, a las modificaciones del metabolismo energético y de las funciones de servicio vegetativo vinculadas a este. La etapa de adaptación de larga duración comprende un gran lapso de tiempo y se desarrolla paulatinamente como resultado de la sumatoria de las huellas dejadas por los esfuerzos repetidos y está relacionada con el surgimiento de los cambios estructurales y funcionales en el organismo que aumentan notablemente las posibilidades adaptativas de éste. Cambios Bioadaptativos: Durante la actividad anaeróbica láctacida, (arrancada), encontramos cambios y modificaciones provocados por el tipo de actividad que se realiza , podemos destacar los siguientes:Sangre:
Encontramos elevados aumentos del ácido láctico, las reservas
alcalinas disminuyen ya que neutralizan las grandes concentraciones que
están en exceso y los convierten en débiles, existe también
un aumento de la creatinina. Orina: Existe una diuresis elevada debido a la multiplicación del volumen sanguíneo por minuto y por el aumento de la presión sanguínea en ese tiempo, lo cual provoca un acrecentamiento de la filtración renal. En este tipo de carga, la iluminación acuosa por la piel y los pulmones disminuyen, tienen mayor grado en los riñones. El pH disminuye por aumento de la acidez en la orina y en los músculos. La creatinina
aumenta ya que el CrP se utiliza en la resíntesis del ATP en los
primeros segundos del trabajo y como tiene pocas posibilidades de volverse
a resintetizar aumenta por las condiciones anaeróbicas en que se
encuentra el atleta. Tejido Muscular: El ATP disminuye de 5 mmol a 3 mmol. El CrP disminuye porque es utilizado en la resíntesis del ATP en los primeros segundos del trabajo y no se resintetiza (Anaerobia). La Creatina aumenta debido a que la creatina libre proveniente del CrP no puede combinarse con el grupo fosfato (P) para formar CrP en estas condiciones. El Ácido
Láctico aumenta debido a la oxidación incompleta que
ocurre en los primeros momentos del trabajo. Estos cambios provocan
en el atleta adaptaciones que favorecen al incremento del rendimiento,
pues ya quedan sentadas las bases para su desarrollo posterior. Veamos
pues los más específicos: - Aumento de las concentraciones de CrP. - Aumento en las concentraciones de glucógeno muscular. - Aumento de la síntesis y actividad de degradación anaeróbica. - Aumento de la hipertrofia de fibras de contracción rápida. - Aumento de la actividad de la ATPasa de la miosina. - Aumento de la utilización de ácido láctico como fuente de energía. - Se incrementa en elevada magnitud la producción y concentración de lactato y amonio tanto muscular como sanguíneo. - Se incrementa prácticamente al máximo tanto la actividad enzimática a nivel mitocondrial como también a nivel citoplasmático glicolítico. - Se eleva la actividad de la fosforilasa, hexoquinasa, fosfofructoquinasa (CPQ) como también el láctico deshidrogenasa (LDH). - Se oxida en gran magnitud el NADH+ a nivel del ácido pirúvico por encima de la cadena respiratoria. - En gran medida también se incrementa el metabolismo del fosfágeno. - Se activa la producción
de los tampones alcalinos en vistas a neutralizar en la mejor medida posible
la acidosis producida.
Hasta aquí, hemos realizado un breve análisis que engloba un gran porciento de factores a tener en cuenta durante la planificación del entrenamiento a planificar, si pretendemos que nuestros atletas sean capaces de realizar un arranque explosivo, además este análisis nos lleva a materializar algo que exige este nuevo milenio, conocer a plenitud de donde nacen los requerimientos necesarios para tal actividad y satisfacer de esa forma lo correcto hacia la planificación de cualquier entrenamiento. Espero que les sea útil este trabajo y más adelante hablaremos sobre otros tema de gran interés.
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Lic.
Hector Bárzaga Mora |