Remando por el Perú | ||
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Sobre una brisa húmeda, las piedras crujen con el vaivén de la marea de un mar muy calmado . Un solitario gallo canta, como avisando desde lejos que ya es hora de levantarse. Son las 4:45 de la mañana de un día cualquiera en Cantolao; una bahía situada en el distrito de La Punta, un apéndice de la provincia del Callao, en Lima, Perú. Ya en el agua y con el sacrificio de un soldado en el toque de diana, están los remeros del "Lima" calentando a lo largo de la bahía. Por ahí, al lado de uno, pasa otro equipo. Quizás una o dos embarcaciones pequeñas de un sobreviviente Club. Los más antiguos a lo largo del camino, mirarán con silenciosa nostalgia los Clubes de antaño. Los jóvenes quizás se pregunten cómo puede sobrevivir un Club en esas condiciones o por qué no tienen más remeros. Después de unos minutos, desde lejos se avista un fuerte grupo de botes, con remeros correctamente uniformados bogando en sentido contrario en estricta disciplina militar: el equipo de la Escuela Naval del Perú, eterno y casi único rival del "Lima". Quizás un tenso estímulo de cada uno de los bandos al encontrarse para demostrar cuán mejores son el uno del otro y por ahí una mentada como retando frente a frente quién o quienes ganarán el próximo Campeonato Nacional. Con esta crónica imaginaria puedo describir la situación del Remo en el Perú. Un grupo de amantes de ese palo achatado en la punta que tanto queremos, dispuestos a sacrificar un considerable tiempo para trasladarnos 20 minutos, remar 2 horas y regresar en otros 30 minutos a trabajar o estudiar, a la única pista oficial en Lima. El Remo en el Perú podría declararse en crisis si no fuera por clubes como el Regatas Lima o La Escuela Naval, en menor escala, que aportan la infraestructura necesaria para el adecuado entrenamiento competitivo con miras a campeonatos del exterior. El Campeonato Nacional es muy pobre. Es muy común ver a un solitario remero cruzar la meta y ser el nuevo Campeón Nacional. ¿Pero cómo así, con el nivel interno de campeonatos pueden los peruanos destacar internacionalmente?. Es sencillo: viajar y competir. Al no haber exigencia aquí es obligatorio salir. En la última década los viajes a Italia, Cuba, Canadá Argentina, Chile, han dado mucha experiencia a los remeros juveniles a nivel Club. Es por ello que contamos con campeones en Henley, Cuba y un quinto lugar en el Mundial juvenil. El remo peruano a nivel juvenil ha progresado mucho pero el problema se presenta después. No contamos con apoyo a nivel mayores - salvo casos aislados - y creo que esa es la realidad en toda latinoamérica, al menos por lo que he visto y conversado. Un remero termina el colegio y tiene que estudiar o trabajar porque el remo no le va a rendir económicamente y así cada año se pierde quizás un futuro campeón sudamericano u olímpico. Una realidad distinta son los remeros Masters. Es muy común ver a uno con el titulo de campeón sudamericano o mundial. Incluso los campeonatos nacionales son más exigentes y eso es debido a que ellos aportan la infraestructura necesaria para comprar sus embarcaciones, viajar y entrenar concienzudamente con un fin: divertirse y ganar. No conozco muy bien las realidades de otros países pero el gran "hoyo" que existe entre los juveniles y los masters tiene su origen en las autoridades del gobierno, quienes no dan el apoyo económico suficiente ni ven al deporte en general como una herramienta de progreso social y cultural, además de beneficios económicos como recurso turístico indirecto. ¿Quienes reman en el Perú?. Definitivamente el remo no es un deporte que pueda practicarlo todo el mundo y más si los clubes no cuentan con el material necesario para desarrollarse. Podría hablar de un aproximado de 300 remeros en todas las categorías y sexo, sin contar los nuevos valores de los torneos interescolares. Se rema en el mar. El agua no es muy agitada. El entrenamiento es más liviano por la alta cantidad de sal y las corrientes internas de la marea. Si se quiere entrenar para un campeonato en el exterior, por lo general se utiliza una laguna natural paralela a la costa, a 170 kilómetros de Lima: La Albufera nuevo mundo. Una pista de agua dura muy similar a la pista de "Tigre". Para los campeonatos de Velocidad contamos con una pista de 600 metros en el Callao. Actualmente La Federación Peruana de Remo con el Apoyo del Club de Regatas Lima elaboran proyectos de masificación de la práctica del remo fuera de la Capital. Ahora contamos con torneos a 3000 metros de altura a nivel de exhibición, utilizando lagunas naturales provenientes de los deshielos en la cordillera de los andes. También están los campeonatos de remoergómetro, que poco a poco van tomando aceptación por la mayor facilidad de practicarlo. Ser remero en el Perú requiere de sacrificios, mucha voluntad y un poco de mazoquismo. Es ya una satisfacción viajar y competir y no desentonar con los demás. Quizás otros no lo entiendan pero existe mucho espíritu de competición aunque no se gane. Ganas de ganar existe. Si se pierde también se gana. Si se gana ya es mucho. Quizás algún medio dedique 2 líneas con nombres mal escritos o una foto equivocada pero eso no importa. Son los románticos que no se resignan a una extinción total de este deporte y que gracias a este grupo humano al menos uno pueda sentirse orgulloso del gran sacrifico y alto costo que significa remar una regata en el Perú. Visite la página de Juan Carlos Flores Granda
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